Drew Barrymore pasó de ser la niña de E.T. a convertirse en una joven polémica y perdida a la que le costó bastante esfuerzo ser la mujer que es hoy en día. En una reciente entrevista ha comentado los siguientes aspectos sobre su forma de pensar.

«Mi personalidad es muy adictiva. Nunca he probado la heroína y no quiero probar la cirugía plástica porque siento que podría convertirme en adicta de ambas cosas. Además, pienso que estaría muerta en poco tiempo si las probase».

«No me gusta cambiar mi cara o buscar una belleza poco natural ha sido mi filosofía de vida. Tengo ojeras, fui al dermatólogo y me dijo que podía inyectarme algo para que la piel no esté tan flácida. Me indicó que las ojeras eran tan oscuras porque estaban algo descolgadas y la luz natural no les alcanzaba directamente. Le respondí que me iba a mi casa a aplicarme luz bajo mis ojos y que gracias por el consejo».

«No debería ser lo habitual que una actriz se operase continuamente. Hemos ido demasiado lejos con este tema, especialmente entre la gente joven. Envejecer es un privilegio. El tema está en cómo hacerlo de forma acertada, con humor, con amor propio y con un gran respeto a ese proceso que siempre ha sido importante para mí. Luego empecé a tener hijas y pensé que ese era mi instinto inicial. Ahora puedo sentir todos mis valores de forma más profunda».

Del feminismo opina que «estaba un poco asustada del feminismo cuando era más joven por todas las amenazas de los hombres. Había muchos movimientos de mujeres que estoy empezando a entender ahora. No quiero enfadarme con los hombres, les amo. Me gusta tener ambos aspectos en mi mente. No me gusta meter la política en esto, hay mucha rabia acumulada. No es la forma de mejorar nuestro mensaje».

«A mis hijas les digo que deben tener siempre presente que no se trata de hundir a los hombres». Esperamos tu opinión a este respecto.

Vía | Glamour

via:mascorazon

Drew Barrymore pasó de ser la niña de E.T. a convertirse en una joven polémica y perdida a la que le costó bastante esfuerzo ser la mujer que es hoy en día. En una reciente entrevista ha comentado los siguientes aspectos sobre su forma de pensar.

«Mi personalidad es muy adictiva. Nunca he probado la heroína y no quiero probar la cirugía plástica porque siento que podría convertirme en adicta de ambas cosas. Además, pienso que estaría muerta en poco tiempo si las probase».

«No me gusta cambiar mi cara o buscar una belleza poco natural ha sido mi filosofía de vida. Tengo ojeras, fui al dermatólogo y me dijo que podía inyectarme algo para que la piel no esté tan flácida. Me indicó que las ojeras eran tan oscuras porque estaban algo descolgadas y la luz natural no les alcanzaba directamente. Le respondí que me iba a mi casa a aplicarme luz bajo mis ojos y que gracias por el consejo».

«No debería ser lo habitual que una actriz se operase continuamente. Hemos ido demasiado lejos con este tema, especialmente entre la gente joven. Envejecer es un privilegio. El tema está en cómo hacerlo de forma acertada, con humor, con amor propio y con un gran respeto a ese proceso que siempre ha sido importante para mí. Luego empecé a tener hijas y pensé que ese era mi instinto inicial. Ahora puedo sentir todos mis valores de forma más profunda».

Del feminismo opina que «estaba un poco asustada del feminismo cuando era más joven por todas las amenazas de los hombres. Había muchos movimientos de mujeres que estoy empezando a entender ahora. No quiero enfadarme con los hombres, les amo. Me gusta tener ambos aspectos en mi mente. No me gusta meter la política en esto, hay mucha rabia acumulada. No es la forma de mejorar nuestro mensaje».

«A mis hijas les digo que deben tener siempre presente que no se trata de hundir a los hombres». Esperamos tu opinión a este respecto.

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