Adelanto de la portada de la boda de Rocío Carrasco

En el reportaje, de 56 páginas, nos anuncian que podremos ver cómo se vivieron los tres días de celebración, a todos los invitados y los dos vestidos de la novia, ya que el de la ceremonia en sí, fue el que vemos en la portada, pero luego, se puso uno más cómodo.

La verdad es que la novia estaba guapísima, si la juzgamos por la fotografía. Nada que ver con la primera boda. Sin embargo, a Fidel le vemos como desmejorado, algo que también ha apuntado la periodista Mila Ximénez, ya que la portada se comentó en Sálvame Deluxe. Se añadió que los invitados parecían de relleno, pero Jorge Javier Vázquez señaló que más bien era algo que elogiar que no hubiesen cogido famosos sólo para engordar la exclusiva.

Pero, la pregunta sigue en el aire. ¿Por qué ha vendido la exclusiva? Será verdad que la pareja tiene patrimonio pero no liquidez? ¿Han realizado inversiones poco rentables?

Kiko Matamoros indicó que serían 600.000 euros – 100 millones de pesetas-  lo que la revista ha pagado a la pareja por lo que sería un pack de reportajes del que aún quedaría la luna de miel.

Se tocó también en el programa una cuestión que debería haberse tratado con profundidad hace tiempo. El silencio de Rocío Carrasco. Todos hablan menos ella, y el tener sólo la versión de una parte – de una parte que son varias – no la beneficia en absoluto sino todo lo contrario. Una entrevista sobre las diez de la noche, realizada por Mª Teresa Campos, o por Ana Rosa Quintana si se busca a alguien más imparcial, aclarando todos los puntos que la alejan de toda su familia materna, y de sus propios hijos, sería, además de un puntazo de audiencia, necesario para que no se interprete su silencio como arrogancia o indiferencia ante la actitud de sus hijos hacia ella.